Losartán
100 mg x 30 Comprimidos recubiertos
Cada comprimido recubierto contiene:
Losartán potásico | 100 mg |
Excipientes: Lactosa monohidrato, celulosa microcristalina, almidón pregelatinizado, almidón glicolato de sodio, docusato de sodio, povidona, estearato de magnesio, hipromelosa, macrogol, dióxido de titanio, talco, óxido de hierro rojo.
Tratamiento de hipertensión.
La dosis usual recomendada es:
La dosis de inicio en adultos es de 50 mg una vez al día. En pacientes que presenten una depleción de volumen o que tengan historia de insuficiencia hepática se recomienda comenzar con dosis de 25 mg al día. La dosis de mantención se encuentra en el rango de 25 a 100 mg al día, administrados en una toma única diaria o divididos en dos tomas.
Este medicamento se administra por vía oral con abundante agua y en lo posible sin alimentos. Cumplir estrictamente el tratamiento, no usar más cantidad, con más frecuencia ni durante más tiempo que lo prescrito por el profesional tratante. Si se olvida una dosis tomarla lo más pronto posible, no hacerlo si se encuentra próximo a la siguiente dosis. No duplicar las dosis.
Se han descrito interacciones con los siguientes productos: Diuréticos, otros antihipertensivos; antidepresivos; beta bloqueadores de calcio, medicamentos antiinflamatorios no esteroidales (ej. Ibuprofeno, diclofenaco, naproxeno, indometacina), incluyendo inhibidores COX-2 (ej. Celecoxib). Si la función renal está alterada, el uso concomitante de estos medicamentos puede producir un empeoramiento de la condición. Los medicamentos que contienen litio no deben utilizarse en combinación con Losartán sin que el profesional tratante realice un cuidadoso seguimiento.
Si se presenta alguna de las siguientes reacciones adversas mientras se está en tratamiento con este medicamento, se debe acudir a un médico: ronquera; hinchazón del rostro, boca, manos o pies; dificultad súbita para tragar o respirar. Mareos; infección respiratoria alta (tos, fiebre o irritación de garganta).
El uso de este medicamento puede producir los siguientes efectos que normalmente no requieren atención médica, a menos que sean demasiado molestos o no desaparezcan durante el curso del tratamiento: Dolor de cabeza; dolor de espalda; diarrea; fatiga; congestión nasal; tos seca; insomnio; dolor de piernas; calambres o dolor muscular.